Es un método musical que enseña a los niños cómo relajarse y, al mismo tiempo, aumenta su capacidad de concentración y atención, mejorando la seguridad y la confianza.
El método se adecúa a niños entre 7 y 12 años, aprovechando las ventanas de oportunidad o etapas de desarrollo que se abren a estas edades y que serán determinantes en su desarrollo.
Son siete piezas musicales con guía de voz de 5 a 8 minutos cada una. Contiene sonidos específicos, textos hablados, ritmos cíclicos destinados a crear un entorno adecuado para la relajación y la concentración.
El lenguaje es sencillo y las instrucciones son fáciles de seguir.